1995-06-25.ABC.ARRECIA EL TEMPORAL LORENZO CONTRERAS

Publicado: 1995-06-25 · Medio: ABC

Ver texto extraído
36 / A B C

NACIONAL

DOMINGO 25-6-95

El  Burladero
GRANDES  EXPRESOS

Por Víctor  MÁRQUEZ REVIRIEGO

Cuaderno  de  notas
ARRECIA  EL  TEMPORAL

DICE  el  ex  presidente  Calvo-

Sotelo que se exagera con
esto  de  la  presidencia  europea.
Se  refiere  a  su  intangibilidad
electoral.  Y  sabe  de  lo  que  ha-
bla,  pues  anduvo  en  la  prehisto-
ria comunitaria.

Uno, 

en  su  humildad, tiene di-
cho que  eso viene  a ser como el
Festival  de  Eurovisión.  O,  si  lo
prefieren,  como  la  expo  cartu-
jana,  los  aritos barceloneses  o la
cosa  de  la  capitalidad  cultural  y

J.  A. Ardanza

de  las  fotocopias  madrileñas  del
año  1992 (tan  lejano,  por  cierto).
Y de  intangible,  nada.  Digo más:
sería  de  buen  gusto  y  mucho
tono  celebrar  importantes  elec-
ciones  en  el  semestre.  Porque
no  vamos  a  ser  menos  que  los
alemanes,  que  reeligieron  a
Kóhl, o a los franceses, despedi-
dores  de  Mitterrand  y  recepto-
res  con  Chirac.  Así  que,  espa-
ñoles, a las urnas.

Me  acuso  de  escribir  con  dos
palabras  feas:  ¡ntangibilidad  y
capitalidad.  Y  además
ahora  escribo  otras  dos
más: 
gobernabilidad  y
credibilidad.  Son  sustan-
tivos  abstractos  termina-
dos en  «dad», intermina-
bles  por  su  número  de
sílabas y muy propios de
ejecutivos,  periodistas  y
políticos  de  medio  pelo.
La  gobernabilidad  fue  la
coartada  para  el arrejun-
tamiento  de  Jordi  Pujol
con  Felipe  González.  Y
ahora  la  credibilidad  (o
la falta  de  ella)  será  dis-
culpa  para  la  ruptura,
acaso.  Cada  día  más
gente  pide  elecciones:
Ardanza,  Leguina  y  un
señor  Rosell,  creo,  que
preside  a  un  grupo  de
empresarios. Y niegan la
credibilidad...  Será  por-
que  antes  fueron  crédu-
los.  La gobernabilidad, la
¡ntangibilidad,  la  capitali-
dad de la intelectualidad,

me

la  responsabilidad,  la  credibili-
la nacionalidad y la normali-
dad, 
dad. 
Todo  acaba  en  dad  y  es
abstracto, aunque se mida en los
presupuestos  con  dineros  con-
tantes  y  crecientes.  Y  más:  la
sanidad, de  la  que  ya  no  se ha-
bla, 
y  es  otro  sustantivo  abs-
tracto para un problema concreto
(y  de  mucha  fundamentalidad).
La  sanidad  vendrá  para  la Navi-
dad,  a  este  paso;  salvo  que  se
aplique  lo  de  dad  y  se  os  dará.
De verdad.

Como  Jordi  Pujol  es  hombre
de lecturas  patrias, abrió  un libro
de  Salvador  Espriú  para  ver  si
era  capaz  de  encontrar  el  final
del  laberinto,  y  leyó  esto:  «Mo-
ríem  en  tu  o  has  mort  amb  no-
saltres?»  Mi  antiguo  compañero
de  colegio  José  Batlló  lo  tra-
duce  así:  «¿Moríamos  contigo  o
eres  tú  quien  murió  con  noso-
tros?»...  Buena  pregunta.  Pues
hay  que  ver  quién  madruga  a
quién  cuando  sea  llegada  la
hora.  Y también  si  merece  o  no
la pena aliarse,  alinearse  o sim-
plemente  aliñarse  para  los  pre-
supuestos  de  otoño-invierno.
Tal  vez  no  lleguemos  a  la  pre-
supuestariedad  por  aquello  de
la  electoralidad  o  comicialidad.
Y  bien  estaría  todo,  si  así  aca-
bamos  con  la  mal  llamada  go-
bernabilidad.  Aunque  ya  veo
que  para eso  hay  que  recurrir  a
la  credibilidad,  pues  aquí  nos
pirramos  por  las  palabras  lar-
gas. 
Sobre  todo  en  tiempo,
como  el  ya  tan  cercano,  de
grandes  expresos  europeos.  En
cuyo  nombre  nos  estamos  car-
gando  tantos  ferrocarriles  espa-
ñoles.  Qué  barbaridad,  qué
atrocidad...

TENEMOS ahora de máxima

actualidad  a  los  jueces.
Esta vez son Bueren y Garzón
los  concernidos.  E!  primero  se
metió, quizás impru-
dentemente,  en ca-
misa de once varas
al  ordenar  que  los
restos de los etarras
Lasa  y  Zabala fue-
sen entregados a la
familia directamente
en  el  cementerio
para que allí fueran
inhumados  sin  más
problemas. Pero en-
tonces  era  cuando
surgía  el  problema, 
pues se le daba a la 
caterva de los bata-
sunos  y  demás  compañías  un
notable pretexto para organizar
el  escándalo.  Cierto  era  que
pensaban armar con los restos,
en cualquier circunstancia, todo
el ruido posible. Pero nunca, en-
cima, con facilidades, con victi-
mismo y con todos los ingredien-
tes  que  proporciona  la torpeza
política. En este caso, ¡a torpeza
política del señor Bueren.

/'
J  '  X

En cuanto a Baltasar Garzón,
nuevo  escándalo  de  escuchas
ilegales.  También  a  él  le  han
grabado conversaciones. La im-
portancia  del  hecho  radica  no
tanto  en  el  contenido,  ya  que
Garzón es cauteloso, como en el
significado  de  la audacia  ilegal
que  contra  él  se  perpetra.  En
una de estas conversaciones, el
juez tranquiliza a su madre so-
bre las escuchas y le dice que no
cree en tanto atrevimiento. Pero
ha existido.

Garzón  sigue  siendo  la
máxima  preocupación  del  Go-

Por Lorenzo CONTRERAS
bierno. Su interés por conocer la
documentación de ¡as presuntas
relaciones  Cesid-GAL  podría
estar en el origen de la reserva
que  al  parecer  ha
mostrado el juez to-
gado  militar  ante  la
alarma  oficial  de-
sencadenada.  Po-
dría uno dar más de-
talles,  pero  no  me
parece prudente.

La  situación  se
puede  complicar  to-
davía en mayor me-
dida  si  se  confirma
que  Antonio  García
Trevijano  piensa
querellarse  contra
Felipe González, Se-
rra,  Perote  y  Manglano  en  el
asunto relativo a las escuchas al
Rey. La competencia, si este úl-
timo  extremo  resulta  cierto, co-
rrespondería a la Audiencia Na-
cional, con rieso evidente para el
mundo  oficial  de  que  la  causa
fuese instruida por Baltasar Gar-
zón.

El odio contra Garzón ha ido
creciendo en los últimos tiempos
en progresión geométrica. Hace
días, Garzón «desactivó» el tes-
timonio que pretendía aportar un
matrimonio  riojano en favor del
antiguo director general de la Se-
guridad  del  Estado  señor San-
cristóbal. Según parece, el juez,
que arruinó los propósitos de la
pareja recordándoles la respon-
sabilidad en que podrían incurrir
por  falso  testimonio  (ciento
treinta  millones  de  pesetas en-
tregados por ellos al ex director
general para su personal admi-
nistración), ha enviado al Tribu-
nal  Supremo  denuncia  contra
José Barrionuevo, por
entender que el ex mi-
nistro  y  actual  dipu-
tado socialista ha ins-
pirado  esa  declara-
ción, 
luego
desmentida  por  ma-
rido  y  mujer,  que
«huyeron» despavori-
dos  del  Juzgado  nú-
mero 5 de la Audien-
cia  Nacional.  La res-
ponsabilidad  atribuida
por  Garzón  a  Barrio-
nuevo  se  basaría  en
presunta inducción a la
falsedad documental.

Así pues, de nuevo
el temporal político-ju-
dicial se abate sobre el
escenario  celtibérico.
«Diario 16» y la revista
«Época»  tienen  las
grabaciones relaciona-
das con Garzón. No es
seguro que sean obra
del Cesid. Aquí, cual-
quier espía vale.

no

-Vengo  advirtiendo  que  existe  una  conspiración  contra  el  Estado y
creen. Voy a seguir gobernando y entonces será demasiado tarde.

ABC (Madrid) - 25/06/1995, Página 36
Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los
contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición
como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los
productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.