1998-02-20.LA VANGUARDIA.SOGECABLE

Publicado: 1998-02-20 · Medio: LA VANGUARDIA

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12  LA VANGUARDIA

POL

ICA

VIERNES,  20 FEBRERO  1998

•  El principio d1 fin de la carrerajudicial  de Gómez de Liaño pudo empezar a escri
birse  ayer. El Tribunal Supremo actuará contra este controveitido  magistrado ante
la  sospecha de que ha dictado resoluciones injustas a sabiendas en su particular cru
zada  contra Sogecable. El juez corre el serio riesgo de ser despojado de la toga

por  el juez  querellado  y el tribunal
que  entendió  en los recursos contra
sus  resoluciones que los datos revis
ten  apariencia  delictiva  a los efectos
del  artículo  446  del  Código  Penal
(sobre  prevaricaciónjudicial)  como
‘resoluciones  injustas’, lo que deter
mina  la admisión  de la querella y la
apertura  de la instrucción”.

El  Supremo procede contra Lkiño por
actuadones  en “átiiencia  delicfivas”
Ádm itida una querella por prevaricación por la intervención deijuez en • el caso Sogecable
 MADRID. —  La  Sala Segunda o de

FERNANDO GARCÍA

La  querella  de  Prisa  se centraba,
como  recoge el  auto  del  Supremo,
en  seis  actuaciones  presuntamente
ilegales  de  Liaño  que  la Audiencia
enmendó  antes de que eljuez Ismael
Moreno  —heredero de  la causa  tras
la  recusación  de  aquél— archivara
parcialmente  el caso y decidiera  el
envío  de  sus poco  relevantes  “res
tos”  a  la jurisdicción  ordinaria.  La
primera  decisión  cuestionada  es la
ileclaración  del  secreto  total  de  las
actuaciones  en  el  caso  Sogecable,
que  Liaño  decretó el  12 de mayo de
1997.  La empresa  recurrió y la Sala
de  lo  Penal  anuló  y  descalificó  el
auto.  Pero  48 horas  después  Liaño
desafió  al tribunal  volviendo  a  im
poner  la  reserva  sobre parte  de  las
diligencias,  lo que  le valió un nuevo
revolcón  de la Sala.

 respectivamente.

El  tercer auto que el TS enjuiciará
es  la prohibición  de salir del país sin
permiso  que Liaño  dictó el 28 de fe
brero  contra  el presidente,  el conse
jero  delegado  y el secretario general
de  Prisa  y  Sogecable, Jesús  de  Po
lanco,  Juan  Luis Cebrián y José Ma
 Las
ría  Aranaz,
otras  tres  actuaciones  por  estudiar
son  la imposición  de  “libertad  pro
visional  bajo  fianza  de  200  millo
nes”  para  Polanco,  el retraso  en 72
días  en la entrega de un informe que
la  Sala  había  pedido  al juez  y una
exigencia  de  datos  sobre  Sogecable
que  esta instancia estirnó que podía
vulnerar  derechos fundamentales.

lo  Penal del Tribunal  Supremo (TS)
acordó  ayer abrir  diligencias contra
el  magistrado  de  la  Audiencia  Na
cional  Javier Gómez de Liaño por la
“apariencia  delictiva”  que  revisten
sus  actuaciones  en  el controvertido
caso  Sogecable,  en  tanto  que  su-

 puestas  “resoluciones  . injustas” y

por  tanto  constitutivas  de  prevari-•
cación  judicial.

.

La  apertura  de la causa  se deriva
de  la simultánea  admisión  a trámite
de  la  querella  que  el  grupo  Prisa,
propietario  de Sogecable (gestora de
Canal  Plus), formuló  con-
tra  Liaño  a  raíz  de  autos
suyos  que la propia  Sala de
lo  Penal  de  la  Audiencia
revocó, y tildó  de “arbitra
rios,  irrazonables,  despro
porcionados  y  erróneos”.
Aunque  la medida  del Su
premo  sólo afecta directa
mente  a Liaño, el correcti
vo  que  implica  es extensi
vo  al  “indomable”  fiscal
Ignacio  Gordillo,
 como
proponente  de  las resolu
ciones
prevaricadoras.
Sión  contradice  asimismo
al  fiscal del Supremo  Luis
Benéitez,
 que  pidió  la
inadmisión  de  la  querella
de  Prisa.

 supuestamente

 La  deci-.

El  auto del Supremo  de
sestima  otras  tres  quere
llas  contra  Liaño.  Dos  de
ellas  se referían también  al
caso  Sogecable  y  fueron
presentadas  por la Asocia
ción  de  Abogados Demó
cratas  por  Europa,  próxi
ma  al  PSOE, y  la Asocia
ción  de  Estudios  Penales,
que  encabeza  el  abogado
José
 Emilio  Rodríguez
Menéndez.  Este mismo le
trado  es el  firmante  de  la
tercera  querella  archiva
da,
 que  formuló  después
de  que  Liaño  le  hubiera
imputado  en  un presunto
encubrimiento  de  terrorismo  en  re
lación  con el vídeo sexual grabado al
director  de  “El  Mundo”,  Pedro  J.
Ramírez.

El  auto  del  Supremo  consiste  en
un  aséptico repaso de la instrucción
del  caso Sogecable al hilo de las acu
saciones  de  prevaricación  conteni
das  en  la querella  de  Prisa,  más  un
breve  párrafo  de  conclusión:  “De
culinto  hemos expuesto —dicen en él
los  magistrados—, surge una  oposi
ción  tan  extrema  entre  lo sostenido

 _____

Una sala libre
de sospecha
•  Los  integrantes  de  la  sala  que  ayer
acordó  actuar  contra  Liafío  —Ramón
Montero,
 José  Manuel  Martínez-Pere
da  y Enrique  Bacigalupo— han  perma
necido  al margen  de  las polémicas  que
ha  protagonizado  el magistrado  y están
libres  de sospecha de parcialidad.  El po
nente  del  caso,  Martínez-Pereda,
 ha
mantenido  estrechas  relaciones  con él,
en  parte  debidas a su amistad  con algún
juez  al que el padre  del querellado, Ma
riano  Gómez,  preparó  en las  oposicio
nes.  En cuanto a Bacigalupo,  Liaño fue
el único  vocal del Poder  Judicial que  en
1996  le apoyó en la primera  votación  a
presidente  de la Sala Segunda. Tampo
co  existen  dudas  sobre el presidente  de
la  sala juzgadora,  Ramón  Montero,  ni
sobre  el juez  que  instruirá  las diligen
cias:  Joaquín  Martín  Can iveli.

 _____

El  tribunal abre diligencias contra
el  magistrado por persistir en
actuar contra los directivos de
Prisa con autos que la propia
Audiencia revocó y descalificó

Es probable que el Supremo remi
tael  auto de ayer al Consejo General
del  Poder  Judicial  (CGPJ).  La  ley
prevé  que  dicho  órgano podrá  sus
pender  a un juez “cuando se hubiere
declarado  haber  lugar  a  proceder
contra  él por delitos cometidos  en el
ejercicio  de  sus funciones”.  Liaño
fue  uno  de  los ocho  miembros  del
CGPJ  que en marzo  de  1996 votó a
favor  del  cese  de  Pascual  Estevill
como  vocal de ese órgano por  estar
imputado  ante el Supremo..

EL PRINCIPIO  DEL FIN.  Si la condición de imputado de Gómez de Liafío se hace firme, el
Consejo  General del Poder  Judicial puede  apartarle de la Audiencia Nacional

DANI DUCH

Enfrentado a todos:

•  Las controvertidas  actuaciones  que Javier Gómez
de  Liaño  llevó a cabo en el caso Sogecable le enfren-
taron  con buena parte de sus colegas de la Audiencia
Nacional,
 en  especial  con  Baltasar  Garzón,  Ismael
Moreno  y los miembros  la Sala de lo Penal  a los que

 conspiradores  acabaron  imputados  anteel  Supremo
 —en el caso de Liaño por prevaricación— a raíz de una
 denuncia  del fiscal general  del Estado  que  acabó  en
 archivo.  El juez Ismael Moreno  tuvo un doble, pero
 menos traumático,  encontronazo  con Liaño: prime-

   Un juez estrella que ha

mar  los “autos de choque”  de esa instrucción.

correspondió  enjuiciar  y revocar lo qúe se llegó.a lla- • ro al aceptar  su recusación po  estimar  que “se halla

 justificada  la sospecha de parcialidad  del recusante”
 después  al  archivar  parcial-
 el caso y dejarlo reducido

 ,
                              mente
                      a
 un sumario  menor.
      Pero

La  contienda más espectacular
fue  la que Liaño  mantuvo  con su
antes  amigo Garzón  a raíz del es-
crito  por el que éste se abstuvo  de
instruir  la recusación que  el con-
sejero  delegado  de  Prisa,  Juan
Luis  Cebrián,  había  formulado
contra  aquél por “enemistad  ma-
nifiesta”  e  “interés  indirecto  en
la  causa”. En aqueltexto.  Garzón
fundaba  su renuncia en el “cono-
cimiento  extraprocesal”  de  una
 corIspfr?dóa  entre LiaIo,  los fiscales Igna-
sc1pctes&1
cio  Gordillo,  Eduardo  Fungairiño  y María•Dolores
Márquez,  el abogado AntonioGarcía-Trevijano  y el
director  de  “Epoca”  y promotor  de  la  primera  de-
 supues-
nuncia  contra Sogecable, Jaime ampmany,
tamente  tendente  a  “acabar con Polanco”  mediante
la  dilatación  del caso Sogecable. Todos los supuestos

      .  ,
    de insolita alguna de
      sus actuaciones

 la más trascendente  de las
     batallas que Liaño perdió con sus
  peruiuo et prestigio entre
   compañeros fue la que  declaró  a
  sus colegas, que califican    los componentes  de la sala segun
                 da de la Audiencia  cuando califi
     có de “insólita”  su decisión  de re-
        vocarle
 un  auto  y,  sobre  todo,
                              cuando
 consulto  a las partes  del
  caso  Sogecable  sobre  la  conve
 niencia  de denunciarles  por la  dureza  de  sus térmi
 nos.  El desafio  costó a Liaño  una  multa  de  350.000
 que  el Consejo General del Poder  Judicial  le impuso
 por  una  “notoria y grave falta de  respeto”  hacia  sus
 superiores. Este expediente  figura en la documenta
 ción que  el Supremo  estudió antes de decidir abrirle
 diligencias por supuesta  prevaricación.

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