1997-09-27.ABC.SOGECABLE
Publicado: 1997-09-27 · Medio: ABC
Ver texto extraído
SÁBADO 27-9-97 NACIONAL ABC / 27 Garzón no denunció la supuesta trama contra Polanco porque no comprobó su veracidad El instructor declara el secreto y cita como testigo al fiscal-jefe de la Audiencia Madrid. Nieves CoHi Durante más de tres horas prestó ayer declaración en el Supremo el juez Baltasar Garzón, al que se imputa no haber cumplido con su deber de denunciar delitos cuando conoció la existencia de una posible trama para mantener vivo el «caso Sogecable» y la participación en la misma del instructor de ese procedimiento, Javier Gómez de Liaño. Garzón explicó que no hizo nada porque «no pude comprobar en ese momento» la veracidad de los hechos. Garzón ofreció un amplio y detallado relato de los hechos que ya mencionó en la resolu ción del 3 de septiembre. El juez, añadieron, ha facilitado los nombres de otras personas que no se mencionaban en ese auto. Baltasar Garzón y Javier Gómez de Liaño llegaron pasadas las nueve y media de la mañana al Tribunal Supremo, donde habían sido citados como imputados por el magis trado de la Sala Segunda Joaquín Delgado, instructor de las diligencias abiertas a instan cias del fiscal general del Estado. Jesús Car denal intrerpuso una denuncia tras conocer una resolución del 3 de septiembre en la que Garzón asegura haber tenido de forma «ex- traprocesal» noticias de la participación de Gómez de Liaño en una hipotética trama cuyo fin seria impulsar el proceso contra So gecable (que el propio Liaño instruye) y lle var a la cárcel a Jesús de Polanco. Gómez de Liaño y Garzón, cuya antigua amistad se ha ido deteriorando en los últimos meses, coincidieron en los pasillos del Tribu nal e incluso cruzaron unas breves palabras. Tres horas de declaración El primero en declarar fue Garzón. Comen zada la comparecencia, el fiscal, José María Luzón, solicitó que se decretara el secreto de las actuaciones, petición a la que se sumó Garzón, asistido por el letrado Manuel Me dina González, antiguo compañero de estu dios del juez. Se opusieron los abogados Be nito Garrido y Juan de Rojas, acusadores en el «caso Sogecable», Gómez de Liaño (que se defiende a sí mismo) y el también imputado. Antonio García Trevijano, que ejerce su pro pia defensa y la del magistrado Joaquín Na varro. Como codefensor de este último, Jesús Santaella, que ha representado al coronel Pe- rote y a Mario Conde, socio del hermano de Javier Gómez de Liaño. Finalmente, el instructor accedió a la peti ción del fiscal. Fuentes jurídicas indicaron que una de las razones que ha llevado a Del gado a declarar ayer el secreto, cuando lo negó hace pocos días, ha sido evitar que los imputados presentes conocieran antes de sus comparecencias la declaración de Garzón. García Trevijano: «Una hipocresía» García Trevijano se quejó por la decisión de Delgado y la consideró una «hipocresía» ya que, explicó, «somos íntimos amigos [en referencia a él mismo y a los también imputa dos Gordillo, Márquez de Prado y Navarro] y nos lo vamos a contar». La declaración del se creto demuestra «que es un juicio político». El instructor acordó también, a petición de Gómez de Liaño, la declaración como testigos el 6 de octubre del fiscal-jefe de la Audiencia Nacional, Eduardo Fungairiño, del fiscal Pe dro Rubira, del periodista Jaime Campany (querellante en el «caso Sogecable») y del ca tedrático Enrique Gimbernat. La extensión de la declaración de Garzón obligó a posponer la de Gómez de Liaño, que se producirá el lunes por la mañana. Este úl timo esperó en el Palacio de Justicia hasta que le avisaron de que podía marcharse. Fuentes judiciales han explicado que Respecto a la imputación que pesa sobre él (omisión del deber de denunciar delitos). Garzón explicó que cuando conoció la partici pación de Liaño en la supuesta trama para mantener vivo el «caso Sogecable» (lo que podría ser constitutivo de un dehto de preva ricación por parte de Liaño) no interpuso de nuncia alguna porque «en ese momento no pude comprobar la veracidad de los hechos». Querella de Polanco Por otra parte, el presidente de Sogecable, Jesús de Polanco; el consejero delegado, Juan Luis Cebrián; y dos miembros del Consejo de Administración han presentado una querella contra Gómez de Liaño por «al menos, tres delitos de prevaricación» que el juez habría cometido al dictar las resoluciones con las que prohibió a Polanco y Cebrián sahr de Es paña sin su permiso, mantuvo el secreto tras ser levantado por la Audiencia Nacional e im puso a Polanco doscientos millones de pese tas de fianza. i^'STALAC /e«oS PESCADERÍAS CORUÑESAS E N V I A M OS A P R O V I N C I AS Y E X P O R T A M OS AL E X T R A N J E RO A N G U L AS S A L M ÓN A H U M A DO P R E P A R A DO A R T E S A Ñ A L M E N TE SIN A D I T I V OS NI C O N S E R V A N T ES L OS M E J O R ES P E S C A D OS Y M A R I S C OS D EL M U N DO iPARCAMIENTOPROPIi C/ Juan Montaivo, 14 (Detrás de la Cruz Roja, Reina Victoria) Teléfono 5351017 "EL MEJOR PUERTO DE MAR EN LA CAPITAL DE ESPAÑA" Diftmden un anónimo sobre la supuesta conjura para acabar con Liaño Madrid. N. C. Los abogados Juan de Rojas y Benito Garrido, que ejercen la acusación en el «caso Sogecable» y que se han personado en las diligencias abiertas a Javier Gó mez de Liaño y a Baltasar Garzón en el Tribunal Supremo, entregaron ayer al instructor de la Sala Segunda una nota mecanografiada que dijeron haber en contrado en los buzones de sus respecti vos despachos. El escrito, supuestamente redactado por una funcionaría de la Audiencia Na cional que no revela su nombre, repro duce una conversación que habrían man tenido Baltasar Garzón y el presidente de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacio nal, Siró García. «Como funcionaría de la Audiencia Na cional -dice textualmente-, escuché en julio de este año una conversación que le relato y no denuncié por rhiedo a ser re- presaliada». La supuesta conversación se habría producido en los siguientes términos: García: «Tenemos que cargarnos a Gó mez de Liaño. Recuerda que estamos comprometidos». Garzón: «No veo ma nera». García: «No te preocupes. Tene mos a Otero y a Moscoso [ambos, vocales del Consejo General del Poder Judicial, que la semana próxima estudiará si Liaño y Garzón deben ser suspendidos cautelarmente] y yo me ocupo de la Sala Segunda [del Tribunal Supremo]». El anónimo, que se despide con un es cueto «saludos y justicia», asegura que también escuchó la conversación «Don Guillermo [Fernández Vivancos]», secre tario de la Sala de Gobierno, extremo que éste ha negado con rotundidad. «Es una charlotada», dijo del escrito. La Audiencia ve mala fe en la recusación a De Prada Madrid. N. C. El pleno de la Sala de lo Penal de la Audien cia Nacional ha desestimado la recusación que una de las acusaciones del «caso Sogeca ble» planteó el martes contra el magistrado Ricardo de Prada Solaesa, miembro del Tri bunal que resuelve los recursos contra las de cisiones de Javier Gómez de Liaño en ese pro cedimiento. El acuerdo se adoptó por unani midad tras una breve reunión que tuvo lugar ayer. Los once magistrados que asistieron al pleno apoyaron el criterio del fiscal, también contrario a la admisión de la recusación, y de cidieron imponer a los letrados Juan de Rojas y Eduardo Corzo una multa de cien mil pese tas por entender que han actuado con mala fe. La Sala de lo Penal estudió en su reunión la resolución del instructor del incidente, el ma gistrado Francisco Castro Meije, que se opuso a practicar las pruebas propuestas por los letrados ante la falta de «precisión», «va guedad notoria» e «inconcreción» de las mis mas. La prueba consistía en la declaración de catorce testigos cuya relación con los hechos .denunciados no han precisado los abogados recusantes. ABC (Madrid) - 27/09/1997, Página 27 Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.