2016-06-07.UN PLAN DIVINO.SIN AGT ES IMPOSIBLE COMPRENDER LA HISTORIA DE LA ESPAÑA CONTEMPORANEA IVAN

Publicado: 2016-06-07 · Medio: UN PLAN DIVINO

Ver texto extraído
Sin García-Trevijano es imposible
comprender la historia de la España
contemporánea: un ejemplo

En este texto contextualizo, con un ejemplo, la
presentación que hago más abajo de esta persona
tan importante para entender algo en España como
«entidad política» –el ejemplo al inicio del texto
trata sobre los trapos sucios de las personalidades
de tipo «mercenario» que dirigían y en parte aún
influyen sobre la opinión en España–.

Antonio García-Trevijano estaba proscrito y sigue
siendo «un proscrito» para los medios de
comunicación oficiales en España, pero es muy
conocido en internet, y tiene por tanto un futuro
 .
altamente «glorioso» 

Ahora tiene casi 90 años de edad, y sigue
defendiendo la verdad sobre muchos aspectos del
origen del régimen político español actual.

En este audiovídeo en youtube leo casi entero este
mismo artículo y lo comento (después de 4 años):

Continuamos.

Aparte de las anécdotas que vivió, junto a personas
más conocidas ahora (como el expresidente Felipe
González o el anterior monarca español), existen
anécdotas también muy ilustrativas, y que afectan a
personas no tan conocidas –unas anécdotas que por
cierto se pueden asociar a dos o tres detalles, simples
y curiosos, como el de por ejemplo la «relevancia
simbólica» que están adquiriendo cada vez más
ciertos Bancos, Bancos privados que ahora aparecen esponsorizando instituciones como la Real
Academia de la Lengua, la RAE–.

Primavera, por el centro de España. Licencia

CC.by-sa.2.0

Así podemos quizá percibir ese «abismo ético» que los medios de comunicación facilitaron en
España… así como la actual ignorancia que existe en torno a la historia contemporánea -sabiendo
además que dicha ignorancia es un hecho totalmente «lógico», ya que precisamente «la política»,
en una civilización de consciencia aún primitiva, vive en gran medida tapando la verdad, y gracias a
ello.

Esta anécdota se encuentra en el siguiente audio de su programa cotidiano de «radio» en ivoox (a
partir del minuto 56): Preguntas y respuestas a los oyentes (día 05 / 06 / 2016).

La anécdota surge como respuesta a una pregunta sobre Juan Luis Cebrián, que es una persona de
la «élite manipuladora» de España (es decir, alguien que ha «hecho política» (en el sentido más
basto de conseguir «poder» y dinero), mediante los medios de comunicación).
Cebrián tiene que ver con el influyente periódico «El País«, que ha sido importante durante todo el
régimen de engaño llamado «La transición española».

A continuación transcribo lo que dice ahí Trevijano, y completo alguna cosa para
poder trasladar lo dicho desde el régimen oral (y muy emotivo) al régimen escrito…, para así poder
hacerla más comprensible para mí, tal y como puedo entenderla:

«…cuando fracasaron todos los intentos que hice para orientar a los españoles acerca de los
engaños que iban a tener lugar, intenté comprar El País, y me puse de acuerdo con Darío
Valcárcel, un periodista que todavía escribe por ahí.

» Y ahora diré lo que hizo este hombre.

» Yo, llegué a tener el 28% de las acciones del periódico El País, en el momento en que
Polanco tenía solo el 14% [Jesús de Polanco se haría cargo posteriormente del periódico].

» Así que yo iba en camino de tener la mayoría de las acciones, ya que sabía que, o bien
adquiría el 51%, o si no, sería imposible hacer nada, pues se aliarían todos contra mí, y no me
dejarían dirigir el periódico.

» Bien, pues cuando tenía aquel 28%, Darío me traicionó, ¡por 25 millones de pesetas! ¡Sí,
Darío Valcárcel!

» Por cierto, que puse querellas contra Rafael Pérez Escolar, un amigo de Valcárcel, pues juntos
hicieron cierto chantaje, y se apoderaron de 25 millones de pesetas que di para comprar un
paquete de acciones en Valencia.

» Pérez Escolar se quedó con los 25 millones.

» Descubrieron lo que estaba haciendo yo, en secreto, con mi derecho preferente a comprar
acciones, que tenía por ser socio original del periódico (un derecho que quería ejercer en
privado).

» Y cuando iba a dar otro paso decisivo en la compra de más acciones, fui traicionado por Darío
Valcárcel, que no solo me impidió seguir comprando, sino que Juan Luis Cebrián vino a mi
despacho lloriqueando, aunque amenazándome, pues se dio cuenta de que podía tener el
control de El País, y me dijo que ya habían tenido una reunión con los mismos obreros de las
máquinas donde se fabricaba el periódico, para que este paralizara la producción
completamente si lo terminaba dirigiendo yo.

» De ahí el desprecio que siento por Cebrián, hoy nombrado académico de la lengua, pero que
ni escribe bien ni nada… Todo es falso y es mentira… Pero ahí está, en la Academia de la
lengua… por ser director de El País».

Así que García-Trevijano vivió de primera mano algunos eventos importantes para el cambio de
régimen que se dio tras el franquismo (un cambio en gran medida engañoso).

Aparece por cierto en los papeles de wikileaks, como la figura principal opositora a Franco, como
un verdadero peligro para los planes de los EEUU (Kissinger) para el planeta.

Sin conocer a Trevijano, no podemos entender la historia reciente de España, y por eso su
presencia en los medios ha sido anulada con maniobras políticas (difamación, etc.) realizadas por el
que era el brazo fundamental periodístico del régimen actual -el periódico «El País».

Trevijano, por ejemplo, llama ahora a la abstención activa, a no votar en las elecciones españolas,
para no legitimar el régimen actual con más votos… un régimen fundamentado como está en la
corrupción y la traición desde sus inicios.

Trevijano no solo vivió eso, por tanto, sino que se encargó de organizar alianzas democráticas
fundamentales para intentar conseguir el principal objetivo, el de la libertad política real, y el inicio
de una verdadera representación con separación real de poderes (y no la actual oligarquía de
partidos sin separación de poderes y que necesita la corrupción como alimento; actualmente, la
gente, votando, elegimos a las personas que ya han elegido los partidos, así como un largo etc. de
despropósitos que caracterizan esta no-democracia).

Realizando esto, Trevijano vivió por cierto algunas anécdotas muy divertidas, como algún viaje
improvisado en avioneta… y otras anécdotas más escabrosas, como los intentos de asesinato que
sufrió, o un breve periodo en la cárcel, o la definitiva organización de la difamación pública contra
él, realizada por sus enemigos a través del periódico El País, que, como digo, fue el «arma» del
nuevo régimen «democrático» -un periódico compuesto por mercenarios de este nuevo régimen del
engaño que vivimos.

Garcia-Trevijano era pues, como vemos, de las pocas personas que personificó la lucha por una
esencial libertad política, más allá de toda ideología. Él personificaba, como poco, el espacio
mental donde se podría encontrar el sentido para la palabra «transición» (¿transición a dónde?) -
tan comentada.

Así, quien era enemigo de Trevijano, lo era de la libertad, y por tanto, con ello «declaraba al
universo» su elección: la elección por la mentira y contra la libertad, contra la transparencia y la
claridad.

Y así es en parte como vivimos ahora lo que vivimos.

Ver por cierto las descripciones que hace Trevijano de lo que pasa, en sus múltiples audios, pues
muchos no tienen desperdicio aunque a menudo sean repetitivos (siempre hay sabiduría o
informaciones que saltean las horas de su radio).

La claridad parece necesaria ahora, a la hora de poder defender la «esencia de las instituciones», y
su funcionamiento… este funcionamiento que, lógicamente, parece que está afectado por las
décadas de «venta» de España… tras abrir la «botella» del franquismo: el sistema político fue al
parecer de cierta forma vendido, y cada vez más, a la Banca, a ciertos oligarcas y a «nuevos ricos»…,
o bien a grandes empresas u oligopolios ya existentes, tanto españoles como quizá europeos… etc.

Por tanto, hemos vivido unas décadas de lo que podríamos llamar «bananerización» y
desintegración política y cívica, en las que la Nación española se ha sumido a sí misma en la
confusión.

Casi nadie sabe lo que significa «democracia» o «representación», ya que los partidos políticos, con
su función de «integrar las masas en el Estado» (que es el objetivo del fascismo, como repite
muchas veces Trevijano), logran la identificación fatídica entre Nación y Estado, así como muchas
otras cosas que atentan contra el «crecimiento» y la elevación de la ética en lo público (cosas que
explica Trevijano).

Entonces, este señor se encargó de organizar algunos de los principales órganos políticos para
posibilitar una alianza que pudiera llevar a cabo un verdadero cambio de régimen, hacia un sistema
político democrático (uno de tales órganos fue la Junta Democráctica, por ejemplo).

Así pues, Trevijano conoce los orígenes concretos y la calidad ética de muchas de las personas que
figuran o figuraron en el régimen actualmente existente, el llamado engañosamente «democracia».

Son personajes ya mentados, de tipo «mercenario» y traidor, que parece ser, por cierto, el tipo
usual de personalidad pública en España -como Felipe González, o como el antiguo rey Juan
Carlos, o como Juan Luis Cebrián…, que serían algunos de los casos más paradigmáticos.

Por tanto conoció de forma bastante «íntima» el modo de ser de los ahora célebres ex-presidentes
de España, directores de medios de comunicación, etc., y otros seres humanos así, de los cuales,
algunos, aún siguen en puestos cercanos a los gobiernos o bien en las empresas u oligopolios más
«estratégicos».

El hecho de que España esté sumida en el tema de la corrupción, y que ahora mismo, en el 2016, los
medios de comunicación bombardeen la «opinión pública» con cientos de casos de corrupción… es
algo que depende de la historia reciente, de la llamada «transición».

Y por cierto, ya dijimos…: ¿transición a dónde? Nadie decía nada sobre eso 
parece que poca gente estábamos interesados… o bien poca gente parecía saber o siquiera hablaba
de lo que realmente significan palabras como «democracia»… o lo que conlleva el concepto de
«Constitución», en relación al concepto de «libertad política» y de «representación».

 , pues, a bote pronto,

Y este es, por cierto, un tema a pensar, a sentir: el hecho de que los medios aticen las mentes de las
gentes y los votantes para que el mayor número de gente posible sienta la mayor indignación
posible.

Sentir emociones de indignación… ¿arregla algo? ¿Qué provoca eso? Y si sabemos o intuimos que
nosotros de cierto modo «creamos» desde el sentimiento… esto puede ser simplemente «peligroso»
(atizando la «hoguera» que ya estará funcionando, en la creación de nuestra realidad a niveles
profundos).

¿Creará, esa indignación, más y más de lo mismo… más de esa misma realidad que el ego en
general quiere alimentar… más de ese «conflicto creador» de más y más experiencias de
separación?

Hablando en general, la verdad (la transparencia), junto con la belleza y la bondad, son grandes
«efectuadores» de esa relación que somos los humanos:
– tanto entre nosotros mismos como humanos…
– así como entre nosotros y las potencias mental-espirituales que facilitan la existencia o el
desarrollo de este universo (en tanto que el universo es una asociación entre «significados»
mentales, «valores» espirituales y fuerzas físicas).