1990-10-09.EL INDEPENDIENTE.LA SOLUCIÓN GLOBAL AGT

LA SOLUCIÓN GLOBAL
EL INDEPENDIENTE, 9 OCTUBRE 1990 
TOM PAINE = ANTONIO GARCÍA-TREVIJANO
Todos los conflictos bélicos, antes de comenzar el desenlace militar, suelen estar precedidos de maniobras políticas para enredar el «casus beli» en un ovillo de paz. Se fuerza así al adversario a negociar sobre los brillantes hilos del pacífico capullo, dejando intacto al oscuro gusano de la guerra.
La solución global, «no me retiro de Kuwait si Israel no abandona los territorios ocupados», es el capullo de paz hilado por Sadam. La aparente belleza de su rebuscada simetría, a la vez que aglutina a la causa árabe-palestina, descubre la irregularidad ejecutiva de Occidente respecto a las resoluciones de la ONU. Pero las tensiones bélicas no se amortiguan o disuelven calentando, sobre el «casus beli» declarado, otra causa de guerra fría, al modo como se acumula, entre unos mismos litigantes, la demanda reconvencional sobre la principal. Salvo para disuadir a los bomberos, con la amenaza de otro incendio más devastador, nadie puede pretender en serio que se apague el luego con gasolina. La solución global, en este momento de crítica inseguridad para Israel, exigiría una guerra global.
Mitterrand corrige y aumenta su anterior irresponsabilidad, la de armar al ejército que ahora quiere desactivar, con la nueva imprudencia de proponer, como base de negociación, las premisas lógicas de la solución global La aspiración a la falsa grandeza aparta de su tortuoso camino al sentido común. Pero la cima del absurdo, esa que embota al propio instinto de supervivencia, la alcanzó el intelectual Jacob Timmerman, en «La clave», al admitir el hábil planteamiento de los tres arabistas invitados. Sin importarle la contradicción, aceptó el método de un «diagnóstico global», como el de Sadam, para una solución parcial, como la de Bush. Es decir, una masoquista autoflagelación judía como compensación de un sádico castigo militar a Irak.