1976-01-09.LAVOZDEGALICIA.JUNTADEMOCRATICA. PARIS

Publicado: 1976-01-09 · Medio: LAVOZDEGALICIA

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pagina 208« Soj he ©a(ici<tviernes, 9 'de enero de 1976MADRID, 8.—(Crónica de JOSE ONETO).Creciente agitación social, presentación pública en Ma­drid del «Consell de Forces Politiquea de Catalunya»,lar- |J ga reunión del Consejo del jfj Reino, manifestaciones en va­rios pontos de Madrid, caos circulatorio en las principa­les calles de la capital es­pañola. Estas han sido las coordenadas generaies dentro de las cuales se ha desarro­llado la jornada política, una jornada que, a pesar de la creciente tensión, se ha des­arrollado con nna relativa tranquilidad y sin incidentes serios, mientras que los obre-P'ESllSSSEEaSSaEEEES Ihi —0 0 0gi!gI@|33g]g]000000000000000ls]00000000[SlQ0 I0 *--------------------------------------------- . aCRONICA POLITICAE - - • -  ------------------------------------------------ =® iPRESENTACION EN MADRID DEL “CONSELL DE FORCES POUTIQUES DE CATALUYfl”Robles Piquer anuncia que la Policíadesaparecerá del "Campus" universitariola huelga, que mañana cum­plirá su cuarto día y entra­ros del «Metro» decidían ca­si por unanimidad proseguir2üiiiiiuiiitiiti!iui)iiuiiiiuiiiiiiiii>ii<iiiiK!ii{i>iiii!iiiiiiiiiliiluiiiiiiiiiiiii;>iiiiiiiiiiiiiiiii!ii!iuiiiiiiiiiiiiiiiiuiiii»iuiiiiiiiiiiiiiiiaiitiiiiii:iii>iiiii!iii>iiiiiiiiaiii’.'— m— S1 mimados toros y sus deseos de variadas |i aventuras». -En fin, una maravilla de relato. Al se- f ñor Carandell, por lo visto, no le gus.aron = las gallegas y echó de menos a los ga- | liegos. Menos mal que los gallegos que |conozco, que son bastantes, no van a tener =nostalgias del señor Carandell. Lo que inos evitará su retorno. 1t-PLUMA* DE : MEDIANOCHEIcapanrósPLA CONFLICTIVIDADREPAREMONOS para la conflictividad.EL DESCUBRIMIENTOij OSE María Carandell —no confundirw con Luis Carandell, aunque parezcan ciertamente inconfundibles— escribe en «Tele/Expres» de Barcelona un articulo sobre «Las gallegas» que no tiene desper­dicio. Me lo hace llegar, más divertido que irritado, Manolo, el hombre de «A nosa casa». «¡Cómo nos las ponen!..».El tal señor Carandell es una especie de Cristóbal Colón de la mujer gallega, a la que acaba de descubrir con una ópti­ca que Dios se la conserve, pero ante la que Arruga, Barraquer y Castroviejo hu­bieran sacado bandera blanca.Observa Carandell que en Galicia pre­domina el elemento femenino, cosa que no sería mala en sí, si no fuera porque enseguida lamenta que este predominio sea tan lamentable como para hacer que ellas conduzcan el ganado, carguen con pesados fardos y soporten demás topicazos ancestrales. Pero luego, «en los bares y tascas de La Coruña y Ferrol, al mediodía, por la tarde y por la noche, grupos de dos, de tres, de cuatro y más señoras, muy pintadas y más arregladas y enjoya­das que en Barcelona o en Vich, se sien­tan a las masas con algún hombre como quien lleva un niño». A comadrear, dedu­ce el cronista, sin explicarnos porqué las mujeres de Vich tenían que ir más enjo­yadas que las de Ferrol o La Coruña, aunque aquí ese alarde mediomañanero se me haya escapado en veintisiete años de concurrencia. Claro que el señor Ca­randell es distinto y de ahí «aunque se diga que La Coruña es liberal por tradi­ción me pareció que criticaban sin grandes amplitudes de miras y desde luego mira­ban —me miraron así— a quien llevase una mala indumentaria, con franca hos­tilidad».Vamos, que en La Coruña hay que po­nerse chaqué o gargantillas de esmeraldas para tomar las tazas de las dos de la tar­de en la calle de La Estrella. En caso contrario, puedes prepararte para recibir miradas asesinas.Carandell no sabe decir si en Galicia vio mujeres más o menos guapas que en otras partes. Yo lo que no sabría decir, por mi parte, es si Carandell estuvo al­guna vez en Galicia y, admitiendo que ha­ya podido estar, si efectivamente vio a alguna mujer. Porque los indicios...Pero lo gordo viene luego, cuando se refiere a la vieja historia de los matri­monios campesinos que llevan la vaca al toro y ellas, en alarde de finura descrip­tiva por parle del narrador, les reprochan a ellos que no sean como el macho de tur. no, rubricando la historia con esta anto- lógica frase que ya clasifica definitiva­mente la sutil personalidad del caballero: «Anécdota que sirve para ilustrar la tan cacareada ansiedad de las gallegas, así como la simpatía de los gallegos por losEl «bunker», con estos líos, se lo pasa de miedo, decía ya ayer un cronista. «¿No queríais democracia? ¡Pues toma demo­cracia!».La verdad es que la conflictividad en sí no es mala. A veces sirve para poner en su sitio cosas que estaban fuera de él y que no eran conflictivas en apariencia, pero terribles en un fondo de posible in­defensión ante lo que podría ser injusto.Claro está que no hay que pasarse, por aquello de no perder la razón. Yo tengo un amigo orensano especializado en la protesta y lo mismo-sale a la calle vocife­rando contra las celulosas que lo hace al día siguiente vociferando más fuerte to­davía contra la emigración. El hombre me lo explica:—Yo quiero Industrias limpias, renta­bles, seguras, perfumadas.No deja de tener razón. Como la tiene otro amigo, muy exigente el hombre a la hora de comer, que no quiere que le pongan guisos, potajes o melgas, porque lo que a él le gustan son los mariscos, las aves, ios legunados y el «paté» de Estras­burgo. Como a un tercero, que le pasa algo similar, pero con las mujeres. «Hombre, yo ligaría con alguien como la Agata Lys, la Julie Christle o la Laura Antonelli, si no, me abstengo». Y abstenido está el pobre.Cuando hay oportunidal de escoger, infeliz el que no lo hace. Pero a falta de pan... Ya lo decía el «Guerra», cuando le hablaban de los peligros del toro. «¡Más coraás da el hambre!».Más cornadas da la emigración. Porque allí, en la Europa de los idiomas extra­ños, de los extraños rostros, de los ex­traños horarios y los extraños fríos, tam­bién hay contaminación. A fuerza de con­taminarse se han liberado y las alemanas de Ham burgo se van un mes todos los veranos a Mallorca para respirar el puro aire que las chimeneas de su ciudad no hacen posibie en el marco cotidiano.Claro que todo el progreso es incómo­do. Era más hermoso escribir con una piuma de ave que con un bolígrafo y Cho. pin, al natural, sonaría mejor que Chopin en «stereo», pero no son los líricos, tan necesarios e irrenunciables por otra par­te, los que han hecho posible la evolución y el desarrollo del mundo. Fabricar un calcetín de nylon hiede casi tan mal como lo que olia un calcetín de lana pocas ve­ces cambiado. Nuevos tiempos, claro.Lo que pasa es que hay que acostum­brarse a que cada uno diga lo que pien­sa, aunque a veces parezca que no ha si­do posible que algunas cosas se piensen. Por otra parte, la apertura de la veda de la opinión general acaso embriague un tanto y haya bofetadas por coger los mi­crófonos y soltar los mensajes. Entre mu­chas nimiedades y ligerezas, a lo mejor sale de vez en cuando algún espontáneo que dice cosas sensatas. «No tiene usted ninguna razón en lo que dice, pero daría la verdad por defender su derecho a se­guir diciéndolo».El país se pone conflictivo.Acaso saludablemente conflictivo, si le echamos paciencia.¡¡¡3000000®0000000E¡*¿¡0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0SSg¡gi3Sg3aEEg)¡i]lí¡][i]im]gi¡i][í][«¡l3[i(3ba en funcionamiento una ter­cera linea que ha sido mili­tarizada. £1 «Consell de for­ces Poüiiques de Catalunya» se presentaba sin ningún ti­po de clandestinidad ante la prensa madrileña. Y el Con­sejo dei Reino comenzaba su primera reunión del año y su primera sesión bajo la presi­dencia de Torcuato Fernán­dez Miranda. El nuevo pre­sidente pronunciaba una fra­se antológica dirigida hacia los periodistas: «Espero que no pierdan el tiempo espe­rando; de todo lo que tenga­mos que informar Ies infor­maremos ampliamente».Y el «Consell de Fuerzas de Cataluña», que engloba a once partidos políticos con nombres y apellidos, se pre­sentaba públicamente como partidario de la ruptura de­mocrática y pedía al Gobier­no hechos para que se cre­yera en los propósitos. «Es una realidad —decía uno de los portavoces del «Consell» catalán— que somos tolera­dos, pero no queremos la to­lerancia, sino el reconocimien­to, el ejercicio político au­téntico. Europa pide al Go­bierno realidades y hechos concretos. Este Gobierno es un Gobierno que previsible­mente basca una credibilidad hacia una apertura, se habla más de partidos que de aso­ciaciones, se habla de am­nistía, de sufrago universal; pero necesitamos hechos».Durante la rueda de pren­sa con los informadores, los representantes de los once partidos políticos catalanes se mos'raron partidarios de la ruptura democrática, de la formación de un Gobierno provisional, del reconoci­miento de todas las fuerzas politizas, de una autonomía dentro del F-eírdo español, de! restab’e-^-liento de las libertades democráticas, de cambios pacíficos sin violen.cía, de una amnistía gene­ral para responsabilidades políticas y sindicales de la libertad sindical...Por primera vez en mu­chos años se hablaba clara­mente de partidos políticos, los militantes comunistas se presentaban como tai, se cri­ticaba abiertamente ai Go­bierno y se sostenían inclu­so tesis que solo hace unas semanas hubieran provoca­do no solo la Intervención de ta autoridad gubernativa sino el correspondiente pro­cesamiento en el tribunal de Orden Público.Mientras que aún estaban reunidos los componentes del «Consell Catalán», la fuerza pública disolvía a pequeños grupos de manifestantes que intentaban concentrarse en la Delegación Provincial de Sin­dicatos. En plena Gran Vía madrileña, obreros de varias empresas en conflicto preten­dían manifestarse en contra de la congelación salarial y a favor de ios trabajadores del «Metro», que han entrado en su tercer día de conflicto sin que, por el momento, a pesar de que se ha celebrado la primera reunión entre em­presa y jurado, haya esperan­za de arreglo.Por su parte, el Consejo del Reino, en una reunión de más de tres horas, se de­dicaba a estudiar el tema de votaciones, sin que la reunión entrase en mayores detalles. ¿Reforma constitucional? ¿Nombramiento de nuevos procuradores? ¿Prórroga o no prórroga? Probablemente en el plazo de cuarenta y ocho horas después del despacho del Presidente con el Rey se sepa la respuesta segura.En fin, en la primara reu­nión de los 27 rectores con el nuevo ministro de Educación, Carlos Robles Piquer, se de­fendía la necesidad de una autonomía universitaria, ai tLmpo que el titular dei de­partamento anunciaba que la policía desaparecerá dei cam­pus universitario- La decisión ministerial es el primer ges­to espectacular del nuevo mi­nistro de Educación. Por pri­mera vez en seis años, la Po­licía desaparecerá de las Fa­cultades y Escuelas Univer­sitarias y, también por pri- m ra vez, la Universidad co­menzará su segundo trimes­tre totalmente limpia de ins­cripciones de derechas y de izquierdaUna nueva etapa parece empezar...La Junta Democrática, de Españacelebré reunión plegada en ParísVEP.NO GALVAN, TAMALES, CARRILLO Y CAÍ.1ÁCHO, ENTRE LOS 50 ASISTENTES GARCÍA AGUDIN, REPRESENTANTE DE GALICIAPARIS, 8.— La «Junta De-mocrálica» de España se ha re­unido hoy en Par.s en reunión plenaria para examinar la si­tuación poLtica y social en Es­paña, según declaró un por­tavoz-Este facilitó una nota infor­mativa indicando que «cerca de 5Ü personas han participado en la sesión pi_. aria de la Junta Democrática üe España, cele­brada los días 7 y 8 de enero en París, presidiendo Antonio García Trevijano».Añtde la nota que «entre los asistentes se encontraban San­tiago Carrillo (Partido" Comu­nista de España), Masario Agua­do (Partido del Trabajo de Es­paña), Enrique Tierno Galván (Partido Socialista Popular), Marcelino Camacho (Comisio­nes Obreras), Alejandro Rojas Marcos (Alianza Socialista de Andalucía), Ramón Tamames (Junta Democrática de Madrid) Manuel Mora(Juuta Democráti­ca de Baleares;, Vicente Gutié­rrez Pascual (Junta Democrá­tica de Castilla y León). Ramón Fernández Ranadas (Junta De- mocrá.ica de Asturias), José Joaqum D.az de Aguilar (Junta Democrática de Canarias), Fer­nando García Agudín (Junta Democrática de Galicia) y los representantes de ias Juntas Democráticas de Andalucía. Ex­tremadura, Murcia y Valencia.Por la delegación exterior de la Junta Democrática de Es­paña estaban presentes Rafael Calvo Serer, Mario Rodríguez de Aragón y José Vidal Beney- íoü>, concluye la nota a la prese sa.—■ (EFE)