2019-04-11.ELDIADEZAMORA.CUANDO SE VOTA EN CONTRA Y NUNCA A FAVOR DE... EUGENIO JESUS DE AVILA

CUANDO SE VOTA EN CONTRA Y NUNCA A FAVOR DE...
EL DIA DE ZAMORA. 11 ABRIL 2019
EUGENIO-JESÚS DE ÁVILA
http://eldiadezamora.es/art/18473/cuando-se-vota-en-contra-y-nunca-a-favor-de
Convencido estoy que los zamoranos, salvo los “hinchas” de los partidos, fauna cada vez menos abundante, van a votar el 28 de abril al partido al que menos manía le tenga, o en contra de la formación que más asco les dé. En la génesis de la democracia, después del franquismo, los que éramos jovencitos votábamos con el corazón, si bien es verdad, que la inteligencia no entraba en el juego a la hora de depositar el voto en la urna. Yo, un chaval, medio rojo y medio ácrata, un idealista con lecturas en una sola dirección, voté con el alma a un partido que ya no existe, que fue fagocitado por el sistema hasta difuminarlo.
Pasados los años, después de empaparme de las lecturas de García Trevijano, decidí no votar a nadie, porque la abstención consideré que era la mejor manera de expresar que esta democracia es más falsa que la “monea” de la copla. Además, ningún partido me convencía. Por supuesto, nunca vote ni al PP ni al PSOE de Zapatero. Ahora, mi deseo es que los partidos independentistas, uno de extracción neofascista, como los catalanes; otros, nacionalsocialistas, racismo puro, como el PNV, extrema derecha más a la derecha que Vox, no manden y decidan en el gobierno de los que amamos España. No quiero que a Pedro Sánchez, el máximo favorito para ganar por la mínima, lo chantajee esa chusma egoísta, representantes de una de las regiones más ricas de España, cuyos empresarios, durante décadas, antes y durante el franquismo, explotaron a obreros andaluces, extremeños, manchegos, castellanos, gallegos y leoneses, a los que consideraron, como los nazis a los judíos, no humanos. Hay que leer lo que escribió Pujol, el político más corrupto del mundo mundial, de la emigración andaluza.
La Ley Electoral, que ningún partido, ni PP ni PSOE, se atrevieron a cambiar, más la cobardía de Aznar, primero, y después de Zapatero -¡qué calamidad de presidente!-, y los impresentables Rajoy y Soraya, néctar de toda infamia,  han conducido a la patria a su agonía, a una quiebra, a un conflicto inefable, que podría acabar con enfrentamientos entre los españoles demócratas y el nuevo carlismo burgués, que hinca sus raíces en las Vascongadas y Cataluña: Zumalacárregui y Cabrera. De hecho, en esas dos regiones, no se puede ser español, porque te la juegas; ya no existe el Estado ni en muchos pueblos de Guipuzcoa y Navarra, ni en provincias del interior catalanes. Políticos pusilánimes a los que solo les preocupó su negocio, mantenerse en algún cargo de la res pública, mientras España se resquebrajaba. Malandrines, badulaques, felones, ególatras, cual narcisos, enamorados de sí mismo, mientras España se licua. Razones por las que el ciudadano consciente, recto, serio, o no vota, o lo hace en contra del peor. El político se ha convertido en el mayor enemigo del pueblo.
Y esta tarde, a fingir, a pegar carteles antes de tiempo, para que la prensa lo dé en papel, en las redes sociales, en las pequeñas pantallas, como si esa representación de la mentira, convenciese a la gente de que los políticos nos representan. Un pueblo inerme, pues, desarmado, por lo tanto, dispuestos para metabolizar más engaños y embustes.