1976-09-26.ABC.CRISIS CD
Publicado: 1976-09-26 · Medio: ABC
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CRISIS EN COORDINACIÓN DEMOCRÁTICA La oposición busca nuevos instrumentos de actuación conjunta La semana que hoy termina ha servido de marco a la más grave crisis en el seno de Coordinación Democrática desde su nacimiento a partir de la Junta y la Plataforma. Una crisis, latente desde hace varias semanas, que tal vez signifique el principio del fin del organismo unitario. Paralelamente, la posible concordancia de casi todos los grupos con peso específico dentro de la oposici6n en torno a un documento, cuya primera versión fue redactada por el profesor Ollero, expresa la búsqueda de nuevos instrumentos de actuación conjunta. El malestar en Coordinación Democrá- tica se agudizó tras la emisión el pasado fin de semana de un durísimo —tanto por su contenido como especialmente por su tono— comunicado de respuesta al pro- grama reformista del Gobierno. Tanto el Partido Socialista Popular como Izquierda Democrática, que había hecho público anteriormente un comuni- cado mucho mas conciliador, sintieron grandes escrúpulos antes de suscribirlo. Apenas conocido este texto. 1a llamada oposición moderada expresó que no tenía sentido celebrar ya la cena pendiente des- de un par de semanas atrás: Coordina- ción Democrática se había pronunciado unilateralmente, y quedaba, por lo tanto, descartada la posibilidad de una respuesta colectiva. MODERADO PERO EXIGENTE.—Todo esto ocurría el lunes. Ese mismo día el catedrático Carlos Ollero ultimaba la cui- dadosa redacción, de un escrito de siete folios, en el que de forma moderada pero exigente se hacia especial énfasis en que si bien el proyecto gubernamental podía ser aceptado como punto de partida, care- cía de toda virtualidad sin el reconoci- miento de todas las libertades públicas y la Implantación de una serle de garantías electorales. El propósito del señor Ollero y sus cola- boradores era refrendar el documento con la firma de los principales líderes del am- plio espectro de la oposición. Para allanar dificultades, tal y como ocurrió con los llamados escritos «de los 32» y "de los 46", las firmas serían exclusivamente a título personal. En esta ocasión, sin embargo, los obstáculos habrían de resultar mayores. Prácticamente todos los partidos Inte- grados en Coordinación manifestaron de una manera tácita o expresa su negativa a suscribir el ya bautizado como «docu- mento Ollero». La actitud del P. S. O. E., expuesta en esta linea por el propio Feli- pe González, parecía condicionar en gran medida a grupos más proclives a la firma como el P. S. P. e Izquierda Democrática. EL P. S. O. E, CONTRA TREVIJANO.— Precisamente unas breves alusiones sobre la línea de conducta de estos tres partidos, dichas por Antonio García Trevijano en A B C, habría de desencadenar una gran tormenta, aparentemente desproporciona- da con respecto a su origen inmediato y solo comprensible a partir de tensiones ya existentes. El señor García Trevijano — represen- tante en Coordinación del grupo conocido como demócratas Independientes— se hizo eco de un editorial de la Prensa madrile- ña, según el cual «no se puede estar a la "duras" en Coordinación y a la "maduras" de forma Individual», manifestando la ne- cesidad de que los partidos aludidos «pon- gan su conducta de acuerdo con su con- ciencia o su conciencia de acuerdo con su conducta». El Jueves por la tarde el P. S. O. E. hizo pública una respuesta en cuatro puntos calificando la apreciación de García Tre- vijano como «una difamación calumnio- sa» y no reconociéndole «catadura moral ni política» para formularla. Pocas horas después, en el despacho del dirigente carlista Mariano Zufía, se re- unía el Pleno de Coordinación para uni- ficar criterios de cara a la «cumbre» con las plataformas regionales a celebrar el sábado en Valencia y elegir a sus dos re- presentantes en la misma. Con el veto expreso del P. S. O. E., Gar- cía Trevijano fue uno de los designados, obteniendo seis votos más que el propio representante socialista. Enrique Múgica Herzog. Este último —hombre considera- do como muy temperamental— abandonó la reunión poco después, «tras una Inacep- table Intervención del señor García-Tre- vijano». según le p r o p ia versión del P S. O. E. LA NUEVA REDACCIÓN. — Temiendo tal vez que la actitud de su representante significara la salida del Partido Socialista del organismo unitario. Mariano Zufía de- claro a continuación: «El abandono no puede decir que nos cayera bjen. Ignora- mos si existen motivos suficientes para ello, pero no nos parece que éste sea el camino. La Incompatibilidad debería ha- berse dirimido en el seno de Coordinación Democrática, Si existen razones objetivas para que a Juicio del P. S. O. E. el señor García-Trevijano no pertenezca a C. D.. considero que debemos conocerlas todos para que todos los componentes podamos Juzgar a1 respecto.» SI bien la Ejecutiva del P.S.O.E. rati- ficó al día siguiente «su decidido apoyo a Coordinación Democrática y a su línea po- lítica, considerando que Coordinación De- mocrática es el principal instrumento de la oposición en la actualidad». ni ellos, ni los representantes Izquierda Democrática. P.S.P., y U.G.T. asistieron a la nueva reunión celebrada por la tarde. El tema exclusivo de dicha reunión era la reconsideración del «documento Olle- ro» en su nueva redacción, notablemente endurecida con respecto al texto Inicial, una especie de Comisión Mixta Integrada por miembros de Coordinación y repre- sentantes de los partidos no integrados había celebrado varías sesiones de trabajo en pos de una versión más aceptable para la Izquierda. A pesar de que prácticamente todos los párrafos favorables al proyecto guberna- mental han sido suprimidos, el documen- to s i g ue representando una alternativa mucho más dialogante que la expuesta, por Coordinación. Aunque a petición expresa de a l g u n os partidos — e n t re ellos el P.S.O.E.— el tema ha quedado aplazado hasta mañana, lunes, existen fundadas es- peranzas de que el documento sea por fin suscrito.—Pedro J. RAMIREZ.