1997-12-12.ELMUNDO.CORTES ABIERTAS UMBRAL

Publicado: 1997-12-12 · Medio: ELMUNDO

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CORTES ABIERTAS
EL MUNDO. 12-12-1997
FRANCISCO UMBRAL
http://fundacionfranciscoumbral.es/articulo.php?id=642
Ya saben. El presidente de las Cortes, señor Trillo, decidió hace poco abrir un rato las Cortes al pueblo de Madrid. El que la gente haya acudido en masa a visitar el Parlamento no revela un especial fervor democrático, como el que la gente acuda en masa a visitar los «monumentos» en Semana Santa, no revela un especial fervor religioso. La gente lo que quiere es pasar la tarde. Pero el señor Trillo, ya puesto, podía haber invitado al personal a visitar el Parlamento invitándoles seguidamente a quedarse y gobernar: -Hale, ya que por fin están aquí, siéntense, coño, ocupen sus escaños y empiecen a mandar, porque es que los habituales lo hacen fatal. Efectivamente, hoy tenemos una izquierda macarra y una derecha vendepatrias, de modo que sería la ocasión de iniciar una legislatura asamblearia, populista, entre demagógica y democrática, y a ver qué pasa. Yo estoy seguro de que el gentío, con la misma sensatez que ocurre a sus asuntos privados y los resuelve, ocurriría a los asuntos públicos y, un suponer, no habríamos tenido los atascos de la nieve, que el pueblo siempre le echa una mano al pueblo y así nos vamos defendiendo de nuestros gobernantes. También pienso que los madrileños han hecho cola para visitar el Parlamento porque es el sitio donde se insultaban Aznar y González, que ellos lo veían por la tele y todo lo que vemos por la tele apetece luego verlo «en directo», como es el caso de Ana Rosa, que encima mejora mucho en directo (porque el lenguaje televisivo influye tanto que de pronto te dicen: «Pues esta tarde quedamos en el Palace y nos vemos en directo»). Sea como fuere, el señor Trillo ha perdido la gran oportunidad de inaugurar esa democracia presidencialista, asamblearia y sin partidos que viene pidiendo Trevijano largamente, por darle un infarto a Vilallonga, que es noble. El panadero sabe heñir el pan, o sea la masa, el talabartero sabe talabartear las pieles y lo que sea, el curtidor sabe curtir en sus tenerías, allá por Chapinería aún saben hacer chapines, la vieja sabe cómo acariciar el cerro del gato para que el gato se duerma en su regazo. El pueblo, en fin, sabe hacer sus oficios. ¿Por qué no saben los políticos hacer política? Porque en general no son políticos, sino rebotados de algunas oposiciones a notarías o abogacía del Estado, que, como ya tienen cuatro leyes en la cabeza, deciden meterse a políticos, que se cobra del presupuesto y hasta sales en la tele si se te ocurre alguna parida. He dicho más arriba que tenemos una izquierda macarra y una derecha vendepatrias. Es como decir por anticipado que el señor Almunia anda pidiendo clemencia para HB por ir haciendo ambiente -y qué ambientazo cuando el juicio, oyes- para Vera y Barrionuevo, que nunca se han puesto una capucha porque ni las máquinas de fotos llevan ya manguito, como antaño en el Retiro. Y tenemos una derecha vendepatrias porque, fábrica a fábrica, aceralia a aceralia, casa por casa, piso por piso, servicios por servicios, están vendiendo España a pedazos para incrementar la cuenta de resultados y que nos quieran más en Europa, aunque los hijos de la Gran Bretaña acaban de darle otro corte a Matutes en la cosa del Peñón. «España va bien» mientras no nieva. En cuanto caen cuatro copos España va de costadillo y el Gobierno no tiene ni unos perros de San Bernardo para enviárselos con el barrilito de whisky a los sepultados entre Pinto y Valdemoro. Pueblo soberano, tome usted asiento, tome usted escaño y hale.