2011-06-21.EL MUNDO.COMANDANTE SOL RAUL DEL POZO

Publicado: 2011-06-21 · Medio: EL MUNDO

Ver texto extraído
COMANDANTE SOL
EL MUNDO. 21/06/2011 Página, 48
RAÚL DEL POZO
Zumban las abejas de la luz en la bóveda del cielo, las muchachas flotan como ángeles o se tienden en la hierba y yo me dirijo a Sol, el comandante. Los lectores deben saber que los rayos, la llaga de luz, producen alergia y urticaria, pero no se pueden parar sus destellos como no seas Josué.
He hablado con algunos de los muñidores del M-15, de momento despojados de egotismo, he cambiado palabras con otros cercanos al epicentro del seísmo. Me explican que lo ocurrido es muy sencillo, una nueva generación de treintañeros, hijos de la democracia, han dejado de creer en ella porque la han secuestrado los partidos de doble lenguaje que practican la corrupción. ¿Cómo son la mayoría de ellos, en qué creen, a dónde van, qué sueñan?, pregunto. «Creen en pocas cosas, son muy oenegeros», voluntarios, políticamente increyentes. Follar, follan algo, pero no son broncas ni drogotas ni violentos». «Los de Atacc no pintan tanto como tú dices». «Esos sesentones, globalistas, están en un globo, vamos».
Entre las estrellas del pensamiento ácrata destaca Carlos Taibo, que se ha dirigido en algunos momentos a Sol. También se mueven los del 0,7, zapateristas desengañados, algunos cristianos, los de Izquierda Anticapitalista, herejes de IU, gentes de Libertad Constituyente, de Antonio García Trevijano, que han repartido 100.000 pasquines explicando que la política ha salido de internet para tomar las calles. Hay blogueros fantásticos: enriquedans, nacionred, ricardo gallir y los anonymous con lenguaje de cómic y análisis demoledores.
El empaque y la arboladura me parecen anarquistas. Como cuento en El reclamo, La Idea, un conjunto de sueños, te lleva a las barricadas cantando una sociedad sin dios, sin amo, sin rey, sin programa, sin siglas. Javier Esteban, profesor en la Universidad Camilo José Cela, comenta: «Encauzar las pulsiones de libertad y justicia del 15-M es ya el principal reto de la sociedad española. Un nuevo poder constituyente debería refundar el sistema desde la democracia y la justicia. De otro modo, el viejo fantasma del anarquismo español entrará en escena».
Pero los anarquistas de la posmodernidad no hablan de anular el dinero ni de destruir el Estado, ni dicen que no hay luz sin día ni libertad sin anarquía. Tierno recordaba a un anarquista desmedrado que decía: «Cuando las fuentes de la vida se abrían, olía mal». Es que huele mal al principio la catarsis, el zafarrancho de limpieza del establo que Taibo describe en Estado de alarma como socialismo de casino e izquierda anémica.
Dicen los portavoces que los medios son máquinas de guerra, que les dan un trato lamentable y viven obsesionados por poner cara a los líderes y los supuestos intelectuales. «En España, como escribió Ortega, todo lo tiene que hacer el pueblo. Los intelectuales o están comprados o forman parte del sistema de producción», explican.