2004-03-22.LA RAZON.ANOMALÍAS INEXPLICADAS AGT
Publicado: 2004-03-22 · Medio: LA RAZON
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ANOMALÍAS INEXPLICADAS OTRAS RAZONES LUNES, 22 - III - 2004 LA RAZÓN 23 OTRAS RAZONES EL PUEBLO CONTRA LA BARBARIE L as A cebes reveló el contenido de dos docu- mentos secretos para probar que dijo la ver- dad de lo que sabía. Los medios de comu- nicación favorables al PP creen que la torpe- za informativa del atentado es compati- ble con la buena fe de un ministro que no mintió al atribuirlo a ETA. Esta conclusión no es lógicamente correcta. Pues esos docu- mentos demuestran: la incompetencia de la Policía, la mala fe del servicio secreto y la vo- luntad de engaño en el Gobierno. Para dar sentido a todas las anomalías reveladas hay que partir de esta evidencia: los jefes de Po- licía y del servicio secreto querían creer, co- mo el Gobierno, que la masacre era obra de ETA porque eso daría al PP mayoría absolu- ta. 1ª anomalía: despreciar la declaración de Otegui, pese a su novedad. 2ª anomalía: no inspeccionar al instante los vehículos aparca- dos en la estación de Alcalá de Henares. 3ª anomalía: yardar más de siete horas en iden- tificar el texto árabe de la cinta magnetofóni- ca encontrada junto a los detonadores en la furgoneta. 4ª anomalía: informar Acebes a la opinión pública, sin indicio alguno, de que ETA era la responsable. 5ª anomalía: infor- mar el CNI al Gobierno, sin dato alguno, de que la autoría de ETA era «casi segura». 6ª anomalía: informar a las embajadas, sin dato alguno, de que era obra de ETA. 7ª anoma- lía: informar Acebes a la opinión de la exis- tencia de una cinta árabe junto a los detona- dores y seguir aferrado a la probabilidad de ETA. 8ª anomalía: Informar el CNI al Go- bierno de que no era creíble la reivindicación islamista en Londres y de que ETA seguía siendo, sin un solo dato, la conjetura más pro- bable. 9º anomalía: asumir el Gobierno de forma acrítica las gratuitas conjeturas de la Policía y el CNI. El Gobierno Aznar quiso ser engañado, con arbitrarios argumentos de sus funciona- rios, del mismo modo que Bush y Blair qui- sieron serlo por los de los suyos sobre armas de destrucción masiva. La desclasificación de dos notas seleccionadas descubre el escánda- lo de que los servicios secretos dijeran a su Gobierno lo que quería oír y de que éste transmitiera a la opinión mundial, como si fueran hechos probados, el fruto de sus de- seos. Se fabricó una conciencia inocente, al limitarse a transmitir lo que le decían sus ob- sequiosos empleados. Formalmente no min- tió. Pero ante un crimen exótico acusó sin pu- dor a los «sospechosos de costumbre». Materialmente, la imputación a ETA sin in- dicios probatorios constituye una fraudulen- cia directa, o un autoengaño a fin de engañar con buena conciencia a todo el mundo, cuan- do nada obligaba a identificar con tanta cele- ridad a los autores. El Gobierno no ha limpiado su imagen porque no ha desclasificado todos los docu- mentos (heurística incompleta) ni ha inter- pretado la realidad exterior a la mentalidad servil de sus burócratas (ausencia de herme- néutica). Sacrificó la paciente investigación de la verdad a la impaciente proclamación de lo rutinario, los indicios concretos de lo ver- dadero a las probabilidades abstractas de lo plausible. Sin contener un solo dato, las no- tas del servicio de in- teligencia, con super- fluos argumentos en el vacío, no son mate- rial informativo. Lo que sería normal en charlas irresponsables entre amigos se hace anormal en un infor- me de la Policía a su ministro. Así, no esta- ba siendo informado sino adoctrinado. Sus innecesarias comparecencias, sin nada fáctico de que informar, no acreditan más que su irresponsabilidad. La evidente culpa y negligencia del Go- bierno no necesita ser demostrada. Si ha con- currido intención dolosa es una cuestión di- fícil de establecer sin tener información de lo tratado en secreto por el gabinete de crisis. Aznar ha hecho perder las elecciones al PP a causa de sus probadas mentiras sobre los mo- tivos de la guerra de Iraq y de su probado en- gaño sobre la imputación a ETA de la masa- cre de Atocha. La filosofía moral establece que la «ética de situación» está fundada en una falta absoluta de ética. AAnnttoonniioo GGAARRCCÍÍAA TTRREEVVIIJJAANNOO recientes elecciones del 14-M no las ha ganado el PSOE, las ha perdido el Gobierno de Aznar. Paradójica- mente, no es lo mis- mo. Tampoco es cierto que las haya ganado Al Qaida, como pre- tende una visión insi- diosa. Ni es verdad que la ciudadanía españo- la haya actuado emocionalmente, si por tal se entiende una conmoción irracional, pues aun- que hay emociones que obnubilan el juicio, también hay otras que se basan en la razón y la unión de inteligencia y pasión racional es la que ha presidido el voto. Ni mucho menos se puede mantener, según descalificaciones rastreras, que la gente haya actuado bajo el miedo. ¿Desde cuándo enfrentarse con el po- der, en este caso con el poder más fuerte eco- nómico y militar que existe, y situarse del lado de los más débiles es cobardía? Porque quien, en última instancia, ha perdido las elecciones ha sido Mr. Bush. Y quien las ha ganado es la voluntad de justicia y de verdad del pueblo es- pañol, frente a la barbarie que gobierna el mundo. Las ha ganado el tantas veces derro- EL ESTIÉRCOL H ay señores bien alimentados, bien vestidos y tan llenos hasta la garganta de estiércol que el hedor sale junto con las palabras de la boca. Esas heces ensu- cian la vida de todos, emponzoñan el aire, manchan aún a los inocentes. Lo hemos visto con «la mala educación» hace poco. Compro- bar que esto, de lo que ya advertían los sabios, es no sólo verdad, sino que se ha dado en mi país en los últimos días, me produce preocu- pación y tristeza. Yo que soy más bien tonta y me prevengo tarde contra la maldad o las ar- teras astucias ajenas, aun sabiendo de lo que los políticos son capaces, no daba crédito el sábado pasado cuando una amiga mía se ne- gó a salir de casa, muerta de miedo por el cli- ma que vivíamos. Era la noche de las «mani- festaciones espontáneas» contra el PP convocadas por los móviles, el día de asentar el mensaje de que el Gobierno mentía. Enton- ces me di cuenta de que el terrorismo había ganado y no hablo del vuelco en las elecciones, sino de su triun- fo en las conciencias y áni- mos de la ciudadanía. Y lo peor, hay gente que lo ha explotado. Desde el ciego odio emponzoñado, se ha llegado a llamar «asesino» al presidente del Gobierno. Quie- nes han alimentado esta bestia no saben bien lo que han hecho. Se están oyendo barbarida- des de todo tipo y es hora de frenar. Para el futuro, la esperanza y la responsabilidad es- tán puestas en Zapatero. En él cabe confiar para que sepa cuidarse de estos «hombres es- tiércol», pues de su perversa mendacidad na- die está a salvo. LLuuiissaa PPAALLMMAA REBOREDO Y SAÑUDO tado, pero nunca venci- do don Quijote. Y así lo han reconocido las voces de otros países que han marchado en manifestación univer- sal, reclamando un or- den justo y racional. Se ha cumplido un año de la invasión de Iraq. Día a día mueren soldados de las «fuerzas de ocupación», que no de otra manera son vistas por los propios iraquíes, a juzgar por las repetidas manifestaciones que exigen su retirada. Y con plena razón mien- tras se encuentren bajo mando estadouniden- se. Perecen también hombres, mujeres y ni- ños iraquíes en atentados que, si bien tienen como blanco a los colaboracionistas, en sus acciones indiscriminadas alcanzan a gentes inocentes. No hay trabajo y los servicios que atienden las necesidades básicas, como el agua, la electricidad, el teléfono, están por los suelos, según informadores independientes, aunque encuestas nada fiables afirmen que una mayoría de la población cree haber me- jorado. Y se cierne la amenaza de una guerra ci- vil. Tal es el resultado de una invasión, cuyos objetivos de mera dominación política y eco- nómica se muestran a plena luz, desmintien- do cualquier intento de proseguir el engaño. Pero, justamente en estos días, sigue co- rriendo en Kosovo la sangre, y se levanta las llamas de las iglesias ortodoxas en acciones protagonizadas por los albanokosovares, tan queridos por la OTAN y cuyo ejército, el ELK, fue armado por la CIA y financiado con dinero de la droga, mientras se bombardeaba a los serbios. Y si en Iraq no aparecieron las armas de destrucción masiva, tampoco en Af- ganistán se cumplió el objetivo con que ab- surdamente se pretendía justificar una guerra: la captura de Ben Laden. Ni, aunque los faná- ticos talibanes hayan caído, se ha establecido la democracia, ni apenas ha mejorado la si- tuación de la mujer, ni siquiera se controla el país caotizado fuera de su capital Kabul. Ta- les han sido los exitosos resultados de las ac- ciones bélicas de EE UU, con la mano de la OTAN en el caso de Yugoslavia.Y ahora se ex- tiende la versión según la cual el golpe de Haití ha sido dirigido por la CIA. Además, el terro- rismo islámico que se quería combatir, dispa- ratadamente con bombardeos de poblaciones, golpea, crecido, en todo el mundo, reciente- mente en Madrid, pero antes en Bali, Casa- blanca, Estambul, Yakarta, Mombasa, Moscú, Riad. Bush padre hablaba del «nuevo orden mundial» con que EE UU quería como «úni- co pueblo con estatura moral», regular el mun- do. Bush II está llevando a la práctica tal ideal, hundiendo la actual sociedad en el abismo. Marcho en la manifestación del sábado. Circulan hojas cargadas de lucidez. No hay que confundir el mundo islámico con el te- rrorismo; es preciso combatir la xenofobia. Las exigencias de transformación son tan ne- cesarias como radicales. No se reducen a la guerra y ocupación de Iraq, ni al conflicto pa- lestino-israelí. Además, se ataca todo el siste- ma militar, económico y político mundial. La OTAN, las bases. Y no hay asomo de inge- nuidad, pues se denuncian también las posiciones críticas, pero llevadas por intereses económicos de gobiernos occidentales. La manifestación ter- mina, pero la larga marcha continúa. CCaarrllooss PPAARRÍÍSS